Se dio a conocer una llamada al 911 que se hizo de la casa de Demi Moore la noche en que fue trasladada de urgencia al hospital.
En la grabación, la mujer que llama, presa del pánico se puede escuchar diciendo: “Ella fumaba algo. No es la marihuana, pero es similar al incienso”. “¡Demi está con convulsiones y semi-consciente, a duras penas”.
Además agregó: “Ella está teniendo algunos problemas últimamente con algunas otras cosas, pero no sé lo que ella está tomando o no”.
El operador del 911 le pregunta “si la sobredosis fue accidental o intencional” y le responde la mujer “Bueno, fumaba algo, pero la reacción fue accidental”.
Una segunda mujer ingresa en la conversación telefónica: “Ella está con convulsiones, está ardiendo. Le estoy poniendo agua fría en la espalda porque está ardiendo”.
Y se escucha: “Demi, ¿puedes oírme? Sí, está apretando mi mano. No puede hablar. Ella está convulsionando”.
Al final de la llamada, un hombre toma el teléfono y dice que “Demi está mucho más tranquila … ella está respirando bien. Ella se inclina hacia arriba y está hablando en voz baja”.
Se especula que pudo haber fumado K2 o Spice, que es un producto legal a base de hierbas y químicos que imita los efectos del cannabis.
Según informaron: “La llamada de emergencia fue hecha después de que la actriz inhalara óxido nitroso, también conocido como ‘el látigo’”…
Un amigo de la estrella dijo al periódico The Sun: “Demi evita el alcohol y las bebidas cuando sale. Pero en los últimos meses no estuvo comiendo mucho, así que ella también estuvo bebiendo durante el día para tener energía”.
Demi – que fue puesta en libertad de Sherman Oaks Hospital de California ayer por la noche – ‘parecía ebria’-cuando fue ingresada en el centro médico el lunes, pero se cree que era sólo por la enorme cantidad de Red Bull que había consumido.
El amigo agregó: “Parecía borracha, pero no creo que fuera por el alcohol. No es una forma saludable de vivir”.
Demi dejó el hospital ayer y se está recuperando en su casa.
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